Democracia, democracia.....
Estoy cansado de que me hablen de democracia, cuando los lideres de los dos principales partidos no serían elegidos por los votantes de sus propios partidos ni siquiera para presidir su comunidad de vecinos. Como podemos entregar nuestra voz a unos políticos profesionales, domesticados, que forman y en algún extraño caso también sufren, este sistema pseudodemocratico, controlado, mutilado y amordazado, donde para oir una voz discordante que reclame más transparencia y libertad, tenga que suceder, como recientemente en Bilbao, en un congreso donde se les cuela un novel aprendiz de político.
Este sistema se ha convertido en algo parecido a elegir cada cuatro años entre malo, podrido, purulento o fétido y callese otros cuantos años que le volveremos a preguntar lo mismo. No me gusta esta democracia. Creo que somos inmensa mayoría los que pedimos cambios pero esos entes gigantescos que son los partidos políticos no oyen o no quieren oir.
Hoy he conocido esta plataforma, Moviemiento Ciudadano. Quizás sea verdad y se empieza a mover algo. No lo sé. En cualquier caso el mayor error sería continuar inertes sin hacer nada.
Movimiento Ciudadano
sábado, 19 de octubre de 2013
martes, 15 de octubre de 2013
Vuelvo o revuelvo... que es volver a volver
Hoy retomo mi blog. Con la intención de ir recopilando todas las ocurrencias, absurdas mayoritariamente, que se me ocurren y rescatar algunas de las antiguas entradas de mi desaparecido blog. También como un ejercicio de expresión y comunicación, aunque sea algo tan etereo, tan poco concreto, como puede resultar internet.
En cualquier caso, porque me hoy me apetece y porque, dada mi progresiva pérdida de memoria, me resultará muy útil este almacén virtual de incongruencias y enlaces.
Y para comenzar escribiendo, no hay nada más apropiado que un bolígrafo. Hoy voy a escribir sobre mis bolis, en concreto sobre mi bolígrafo Sheattel. ¿Saben ustedes que esta marca fue la que se utilizó para firmar la Declaración de Derechos Humanos en 1948? ¿Y que se garantizaban de por vida?.
Yo uso con frecuencia un Sheattel Sentinel, es uno de los modelos más básicos y populares de la casa, pero no por ello carece de calidad; todo lo contrario su sencillez, economía y robustez le dan una elegancia austera pero muy atractiva y hacen tremendamente agradable su uso. Realmente cuando tengo mi Sheaffer en mi mano, tengo que coger un papel en blanco y escribir, aunque solo sea repetir las mismas bobadas de siempre. Además, en economías frágiles como la del que suscribe, la posible pérdida de un bolígrafo de 10 euros no supondrá nunca la tragedia que supondría perder un Sheaffer alta gama.
Tengo otros bolígrafos considerados de gama más alta, pero la sobria elegancia del Sheaffer, solo se la pueden pelear dos modelos similares que fabricó la británica Parker o la versión española de Inoxcrom. Estos últimos los recuerdo con especial cariño, cuando veía asomar el extremo del Inoxcrom que llevaba mi padre en el bolsillo de la camisa y lo que suponía aquel bolígrafo, algo valioso, casi sacro que estaba reservado a manos expertas. Los niños nos contentábamos con un lápiz o un Bic.
En cualquier caso, porque me hoy me apetece y porque, dada mi progresiva pérdida de memoria, me resultará muy útil este almacén virtual de incongruencias y enlaces.
Y para comenzar escribiendo, no hay nada más apropiado que un bolígrafo. Hoy voy a escribir sobre mis bolis, en concreto sobre mi bolígrafo Sheattel. ¿Saben ustedes que esta marca fue la que se utilizó para firmar la Declaración de Derechos Humanos en 1948? ¿Y que se garantizaban de por vida?.
Yo uso con frecuencia un Sheattel Sentinel, es uno de los modelos más básicos y populares de la casa, pero no por ello carece de calidad; todo lo contrario su sencillez, economía y robustez le dan una elegancia austera pero muy atractiva y hacen tremendamente agradable su uso. Realmente cuando tengo mi Sheaffer en mi mano, tengo que coger un papel en blanco y escribir, aunque solo sea repetir las mismas bobadas de siempre. Además, en economías frágiles como la del que suscribe, la posible pérdida de un bolígrafo de 10 euros no supondrá nunca la tragedia que supondría perder un Sheaffer alta gama.
Tengo otros bolígrafos considerados de gama más alta, pero la sobria elegancia del Sheaffer, solo se la pueden pelear dos modelos similares que fabricó la británica Parker o la versión española de Inoxcrom. Estos últimos los recuerdo con especial cariño, cuando veía asomar el extremo del Inoxcrom que llevaba mi padre en el bolsillo de la camisa y lo que suponía aquel bolígrafo, algo valioso, casi sacro que estaba reservado a manos expertas. Los niños nos contentábamos con un lápiz o un Bic.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)