Existen canciones en cada etapa de la vida. Melodías que te empujan a sentir unas sensaciones particulares y que como la vida misma van evolucionando; las canciones, las sensaciones...
Hace unas horas he vuelto a escuchar esta canción, Sultans of Swing, de los Dire Straits y por unos momentos la melodía me ha retrotraído treinta y tantos años atrás, haciendo que por unos instantes reviviese las mismas sensaciones que sentía cuando la escuchaba cuando apenas tenía 17 ó 18 años.
Me he sentido, como entonces, recién afeitado, cuando embadurnaba mi cara con un montón de espuma para afeitar los cuatro pelos que me salían, y después me empapaba en loción after save creando una aureola con aroma a sábado tarde, y con las hormonas en ebullición salía de casa dispuesto merendarme el mundo, aquel maravilloso mundo lleno de chicas preciosas, un mundo lleno de oportunidades, de esperanzas, de grandes aventuras por vivir y retos por superar.
En fin... canciones de los 18 años. También es cierto que muchas ocasiones la melodía de regreso a casa era muy diferente, pero bueno, eso son cosas inherentes de la volatilidad de la edad. Bandas sonoras de nuestra biografía.